Foxconn y TSMC, los dos gigantes taiwaneses de las cadenas de suministro de tecnología internacional, han acordado comprar 10 millones de dosis de la vacuna COVID-19 para Taiwán. Se trata de una medida que evita un enfrentamiento entre Taipei y Beijing. Pagarán hasta 35 dólares por dosis de la vacuna Pfizer BioNTech y las donarán al gobierno.
BioNTech se asoció con Shanghai Fosun Pharmaceutical Co. para distribuir su vacuna basada en ARNm, que fue desarrollada conjuntamente con Pfizer, en China. Taiwán afirma que el gobierno chino bloqueó un intento de asegurar un suministro de vacunas de BioNTech y luego rechazó una oferta de donaciones de vacunas del continente. Sin embargo, con el nuevo acuerdo, BioNTech y Fosun pueden negociar con empresas privadas en lugar del gobierno taiwanés, que Beijing considera ilegítimo.
Fábricas contra el Covid
Ambos fabricantes de componentes afirman que desde que propusieron la donación de la vacuna y negociaron la compra, no había habido ninguna orientación o interferencia de Beijing sobre la adquisición. Foxconn es un gran fabricante de productos electrónicos por contrato con clientes importantes como HP, Dell y Lenovo, además de ser el mayor ensamblador de iPhone. TSMC es la fundición de semiconductores más grande del mundo, que fabrica chips según las especificaciones para empresas como AMD, Apple y Nvidia, y es responsable de la mayoría de los SoC de teléfonos inteligentes en todo el mundo. La mayor parte de la fabricación de Foxconn se realiza en China y otros países, pero la principal base de operaciones de TSMC se encuentra en la región de Hsinchu de Taiwán.
Taiwán ha sido ampliamente elogiado por su respuesta a la pandemia, pero actualmente está experimentando un brote que ha acelerado la demanda de vacunas. La semana pasada, el gobierno dijo que poco más del 14 por ciento de la población habían recibido la primera dosis. TSMC y Foxconn dicen que las dosis de BioNTech recién aseguradas se enviarán desde sus fábricas en Alemania y deberían comenzar a llegar a Taiwán a fines de septiembre.
Está claro que ambos fabricantes quieren que la pandemia esté controlada en Taiwán. Si suben mucho los casos, deben de tomar medidas de prevención que dificultaría estar al día con las demandas de la producción y seguirá habiendo escasez de componentes. Una compra de varios millones de vacunas para Taiwán hará que TSMC y Foxconn puedan operar a pleno rendimiento mucho antes.
Fuente: The verge
