Intel ya tiene tres demandas por las vulnerabilidades Meltdown y Spectre, debido a que no se ha corregido a tiempo el agujero de seguridad, se ha ocultado el problema y por la pérdida de rendimiento con el parche de seguridad.

Este año está empezando especialmente caliente, sobre todo para Intel, que se ha colocado en el centro del huracán, por méritos propios, debido a las vulnerabilidades Meltdown y Spectre, que ha sido detectado por un equipo especial de Google, denominado Project Zero. Según los datos que tenemos, Brian Krzanich, CEO de la compañía, ha vendido parte de la compañía que preside y se ha quedado con la cantidad mínima necesaria. Para colmo, se supone que sabían del problema antes de empezar la producción de Coffee Lake, según estamos conociendo.

Ha terminado pasando lo lógico y es que le han caído tres demandas en Estados Unidos. Pese a que no es solo cosa de Intel, ya que también está en los procesadores AMD y ARM (al menos una de las vulnerabilidades), eso no quita que este agujero de seguridad este en los procesadores de Intel desde hace veinte años. Puede ser este el motivo del gran retraso que están sufriendo los procesadores Cannon Lake, los cuales estarían siendo modificados por parte de la compañía, para corregir el problema detectado y por eso llegaran a finales de este mismo año.

Se ha lanzado un parche de software que corregiría el problema y se habla de que el rendimiento de los sistemas se reduce hasta en un 30%, aunque de momento, todos los benchmarks que hemos visto con el parche de seguridad, no muestran variaciones negativas de rendimiento que sean significativas.

El problema reside además, en que con todos los datos encima de la mesa, a muchos que han comprado o invertido capitales en desarrollar sistemas con procesadores de la compañía, no les ha hecho la menor gracia estos problemas y se han interpuesto tres demandas contra la compañía, una en el norte de Carolina, otra en Oregón y otra en el sur de Indiana. La base de las tres demandas es la misma: no proteger la seguridad de los usuarios, no revelar la existencia de las vulnerabilidades cuando se detectaron y finalmente, afectar al rendimiento de los sistemas con los parches de seguridad.

Fuente: Gizmodo